Aquel pájaro veló a la mar todas las noches de su vida junto al farero de "Cap Ferret".
Mientras el uno preparaba café el otro soñaba con piar como Charlie Parker. Y generación tras generación, una de las crías de cada camada que nacía en aquella casita de pájaros, amaba el Jazz y se hermanaba con Leo, el farero. Juntos cuidaban por las noches a la mar, para que la luna tuviera donde mirarse y los marineros quien les meciera.
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